La sociedad actual vive rodeada de constantes avances tecnológicos que nos permiten mejorar nuestra calidad de vida y hacernos más fácil el día a día, además el avance tecnológico supone un mayor desarrollo económico a nivel estatal.
Sin embargo, unido a los diversos avances tecnológicos también se ha producido un incremento de las distintas formas de contaminación: contaminación de la atmósfera, del agua y contaminación por la masiva producción de residuos, residuos que se producen en cantidades superiores a la capacidad de regeneración de nuestro planeta, no obstante, es cierto que también para este problema la ciencia y la tecnología nos aportan nuevas soluciones para paliar los resultados de este incremento en la producción de residuos como es la tecnología plasma que consiste en un modo industrial de desintegrar algunos residuos que no puedan volver a reciclarse introduciéndolos en un reactor en el que se consigue romper los enlaces y recombinar los átomos de estos compuestos dando lugar a nuevas moléculas mas simples.
El sistema de recolección de residuos tradicional, contaba con una recogida de residuos sin separar y el volcado de los mismos en un predio llamado basural o basurero, generalmente a cielo abierto y sin normas de seguridad y protección, y cuando posteriormente se empezó a reciclar solo se separaban elementos simples como papel y cartón... Pero pese a la nueva concienciación social para preservar el planeta, y la disposición de una mayoría para participar en la separación y el posible reciclaje de los residuos aún hay un volumen muy significativo de residuos que no pueden ser reciclados ni reutilizados por motivos diversos: pueden ser materiales para los que no se encuentren usos adecuados en ese momento, o cuyo empleo represente un riesgo para la salud o para el medio ambiente. Estos últimos son los denominados “residuos tóxicos y peligrosos”.
Sin embargo, unido a los diversos avances tecnológicos también se ha producido un incremento de las distintas formas de contaminación: contaminación de la atmósfera, del agua y contaminación por la masiva producción de residuos, residuos que se producen en cantidades superiores a la capacidad de regeneración de nuestro planeta, no obstante, es cierto que también para este problema la ciencia y la tecnología nos aportan nuevas soluciones para paliar los resultados de este incremento en la producción de residuos como es la tecnología plasma que consiste en un modo industrial de desintegrar algunos residuos que no puedan volver a reciclarse introduciéndolos en un reactor en el que se consigue romper los enlaces y recombinar los átomos de estos compuestos dando lugar a nuevas moléculas mas simples.
El sistema de recolección de residuos tradicional, contaba con una recogida de residuos sin separar y el volcado de los mismos en un predio llamado basural o basurero, generalmente a cielo abierto y sin normas de seguridad y protección, y cuando posteriormente se empezó a reciclar solo se separaban elementos simples como papel y cartón... Pero pese a la nueva concienciación social para preservar el planeta, y la disposición de una mayoría para participar en la separación y el posible reciclaje de los residuos aún hay un volumen muy significativo de residuos que no pueden ser reciclados ni reutilizados por motivos diversos: pueden ser materiales para los que no se encuentren usos adecuados en ese momento, o cuyo empleo represente un riesgo para la salud o para el medio ambiente. Estos últimos son los denominados “residuos tóxicos y peligrosos”.
CLASIFICACIÓN DE RESIDUOS:
La clasificación de los residuos es un aspecto aún no resuelto que varia según los diferentes autores u organizaciones. En el momento actual, desde el punto de vista legislativo, se establecen los siguientes tipos de residuos según su origen:
Residuos sólidos urbanos (RSU):
Estos residuos son recogidos por los servicios municipales o contratados por el ayuntamiento.
Son los residuos que se originan en las ciudades y áreas próximas procedentes de los hogares, comercios, oficinas, vías urbanas, obras, pequeños negocios, animales domésticos muertos, vehículos abandonados, etc.
Su producción constituye alrededor del 15% de residuos generados.
Gestionar adecuadamente los RSU es uno de los mayores problemas de muchos municipios en la actualidad debido a su heterogeneidad.
Una forma posible para la producción de una menor cantidad de RSU seria la reutilización de los productos cuantas veces fuese posible y no utilizar únicamente productos de usar y tirar.
Residuos industriales:
Son aquellos procedentes de la actividad industrial.
Pueden ser muy variados, en función del tipo de industria que los genere, aunque poseen en común la característica de ser potencialmente peligrosos (pueden ser inflamables, corrosivos, tóxicos o producir reacciones químicas, cuando están en concentraciones que pueden ser peligrosas para la salud o para el medio ambiente), también los hay que son semejantes a los RSU y por lo tanto pueden ser tratados como tales (escombros, gravas, arenas, etc.).
La industria que contribuye más a la producción de este tipo de residuos es la química pero en realidad todas las industrias producen residuos que podrían ser perjudiciales para la salud y el medio ambiente.
Otro inconveniente de este tipo de residuos es que su eliminación es difícil y costosa, y algunos no pueden ser eliminados permaneciendo durante décadas en el medio y contribuyendo de este modo a su degradación. Una manera posible para reducir el impacto es, como en el caso anterior, utilizar dichos productos tanto como sea posible.
Residuos mineros:
Se originan durante las actividades mineras.
Incluyen los procedentes de las etapas de prospección, extracción y almacenamiento de recursos minerales, pudiendo ser sólidos, líquidos o gaseosos.
El polvo levantado en las minas puede contaminar la atmósfera al igual que los gases que pueden desprenderse en la extracción de los minerales algunos más perjudiciales que otros.
El contacto entre los minerales y el agua puede originar distintas reacciones, en función de la naturaleza del mineral o minerales implicados por lo que el agua puede resultar contaminada.
Los residuos mineros no suponen un gran riesgo pero se ha de intentar minimizar su producción y su efecto para evitar posibles problemas futuros.
Residuos radioactivos:
Son materiales que no están destinados a ningún uso y que contienen o están contaminados con isótopos radiactivos en concentraciones superiores a las establecidas por las autoridades competentes.
Se generan en Centrales Nucleares, y en instalaciones que utilizan materiales radioactivos como plantas de tratamiento de minerales de uranio, hospitales, etc.
Estos residuos pueden resultar altamente peligrosos para la salud humana y el medio ambiente incluso aunque se trate de emisiones muy pequeñas.
Se pueden clasificar de diferentes formas:
- Residuos desclasificables: No poseen una radiactividad que pueda resultar peligrosa para la salud de las personas o el medio ambiente, en el presente o para las generaciones futuras. Pueden utilizarse como materiales convencionales.
- Residuos de baja actividad: Poseen una radiactividad baja.
Se consideran de esta categoría aquellos residuos cuyo periodo de semidesintegracion sea inferior a 30 años. Este tipo de residuos debe almacenarse en almacenamientos superficiales.
- Residuos de media actividad: Poseen una radiactividad algo superior a los nombrados anteriormente pero siguen estando por debajo de los niveles de peligrosidad.
Al igual que los residuos de baja actividad, se consideran residuos de media actividad los que tienen un periodo de semidesintegracion inferior a 30 años y también deben almacenarse en almacenamientos superficiales.
- Residuos de alta actividad: se trata de aquellos materiales emisores de una radiactividad que supere los niveles impuestos por los límites de los residuos de media actividad.
Su periodo de semideintegracion supera los 30 años y deben almacenarse en almacenamientos geológicos profundos (AGP).
Residuos agropecuarios:
Pueden ser agrícolas o ganaderos, según el tipo de explotación agropecuaria que los origine.
Antes este tipo de residuos se utilizaba como fertilizantes por su contenido en materia orgánica y mineral pero el aumento en la aparición de explotaciones ganaderas de tipo intensivo, ha supuesto una producción de residuos orgánicos que ya no puede ser gestionada siguiendo las prácticas tradicionales, fundamentalmente por dos motivos:
- Su producción en grandes explotaciones, que dificulta la distribución para usos agrícolas
- El riesgo de una aplicación inadecuada, con los efectos medioambientales y sanitarios consiguientes.
Además de los restos orgánicos y minerales producidos debemos tener en cuenta también los restos plásticos producto de los invernaderos y detergentes utilizados para limpiar las naves agrícolas y ganaderas.
Los objetivos para la gestión de este tipo de residuos son:
- Minimización del Impacto Medioambiental.
- Minimización de la producción de residuos.
- Aprovechamiento de los residuos como fertilizantes y acondicionadores del suelo.
- Revalorización energética de un recurso renovable.
Residuos sanitarios:
Este tipo de residuo es cualquier tipo de material generado en lugares de atención sanitaria. Los residuos sanitarios se clasifican en los grupos siguientes:
a) Residuos sin riesgo:
- Tipo 1: No requieren exigencias especiales en su gestión.
Incluyen: papel, cartón, material de oficina, cocinas, comedores y en general los residuos que no derivan directamente de una actividad sanitaria.
- Tipo 2: No implican riesgo de contaminación biológica y sólo se han de observar medidas de prevención en su manipulación, recogida, almacenamiento y transporte, únicamente en el ámbito del centro sanitario.
Incluyen material de curas, ropa y material de un sólo uso contaminados con sangre, secreciones y/ o excreciones, todos ellos no englobados dentro de los residuos clasificados como residuos sanitarios específicos de riesgo.
b) Residuos de riesgo o específicos:
- Tipo 1: Se deben tomar medidas de prevención en su manipulación, recogida, almacenamiento, transporte y eliminación. Tanto dentro como fuera del centro generador, ya que pueden representar un riesgo para la salud laboral y pública.
Incluyen: material punzante y cortante (agujas, pipetas, hojas de bisturí, portaobjetos, cubreobjetos, capilares, etc.), cultivos y reservas de agentes infecciosos, resto de residuos sanitarios infecciosos y residuos de animales de investigación y/ o experimentación.Este tipo de residuos debe ser recogido y trasladado en envases homologados, con almacenamiento refrigerado. Tras un tratamiento de esterilización y trituración pueden ser asimilados como residuos municipales.
- Tipo 2: Su gestión está sujeta a requerimientos especiales desde el punto de vista higiénico y medioambiental, tanto dentro como fuera del centro generador.
Incluyen: residuos citotóxicos (restos de medicamentos y material de un solo uso que haya estado en contacto con estos fármacos), residuos radiactivos, otros residuos con restos de sustancias químicas y restos anatómicos humanos (cadáveres y restos humanos con entidad, procedentes de abortos u operaciones quirúrgicas).
La disposición de estos residuos requiere incineración a una temperatura que pueda garantizar su destrucción, como residuos especiales.
IMAGEN:
BIBLIOGRAFÍA:
http://www.uclm.es/users/higueras/MGA/Tema06/Tema_06_Residuos_1.htm ,
http://habitat.aq.upm.es/cs/p3/a014.html ,
http://www.proyectosalonhogar.com/Ciencias_ambientales/13Residu/120ResInd.html ,
http://www.cma.gva.es/areas/residuos/res/pir/directiva_general/revpir8.html ,
http://portalsostenibilidad.upc.edu/detall_01.php?numapartat=4&id=108 ,
wikipedia.
La clasificación de los residuos es un aspecto aún no resuelto que varia según los diferentes autores u organizaciones. En el momento actual, desde el punto de vista legislativo, se establecen los siguientes tipos de residuos según su origen:
Residuos sólidos urbanos (RSU):
Estos residuos son recogidos por los servicios municipales o contratados por el ayuntamiento.
Son los residuos que se originan en las ciudades y áreas próximas procedentes de los hogares, comercios, oficinas, vías urbanas, obras, pequeños negocios, animales domésticos muertos, vehículos abandonados, etc.
Su producción constituye alrededor del 15% de residuos generados.
Gestionar adecuadamente los RSU es uno de los mayores problemas de muchos municipios en la actualidad debido a su heterogeneidad.
Una forma posible para la producción de una menor cantidad de RSU seria la reutilización de los productos cuantas veces fuese posible y no utilizar únicamente productos de usar y tirar.
Residuos industriales:
Son aquellos procedentes de la actividad industrial.
Pueden ser muy variados, en función del tipo de industria que los genere, aunque poseen en común la característica de ser potencialmente peligrosos (pueden ser inflamables, corrosivos, tóxicos o producir reacciones químicas, cuando están en concentraciones que pueden ser peligrosas para la salud o para el medio ambiente), también los hay que son semejantes a los RSU y por lo tanto pueden ser tratados como tales (escombros, gravas, arenas, etc.).
La industria que contribuye más a la producción de este tipo de residuos es la química pero en realidad todas las industrias producen residuos que podrían ser perjudiciales para la salud y el medio ambiente.
Otro inconveniente de este tipo de residuos es que su eliminación es difícil y costosa, y algunos no pueden ser eliminados permaneciendo durante décadas en el medio y contribuyendo de este modo a su degradación. Una manera posible para reducir el impacto es, como en el caso anterior, utilizar dichos productos tanto como sea posible.
Residuos mineros:
Se originan durante las actividades mineras.
Incluyen los procedentes de las etapas de prospección, extracción y almacenamiento de recursos minerales, pudiendo ser sólidos, líquidos o gaseosos.
El polvo levantado en las minas puede contaminar la atmósfera al igual que los gases que pueden desprenderse en la extracción de los minerales algunos más perjudiciales que otros.
El contacto entre los minerales y el agua puede originar distintas reacciones, en función de la naturaleza del mineral o minerales implicados por lo que el agua puede resultar contaminada.
Los residuos mineros no suponen un gran riesgo pero se ha de intentar minimizar su producción y su efecto para evitar posibles problemas futuros.
Residuos radioactivos:
Son materiales que no están destinados a ningún uso y que contienen o están contaminados con isótopos radiactivos en concentraciones superiores a las establecidas por las autoridades competentes.
Se generan en Centrales Nucleares, y en instalaciones que utilizan materiales radioactivos como plantas de tratamiento de minerales de uranio, hospitales, etc.
Estos residuos pueden resultar altamente peligrosos para la salud humana y el medio ambiente incluso aunque se trate de emisiones muy pequeñas.
Se pueden clasificar de diferentes formas:
- Residuos desclasificables: No poseen una radiactividad que pueda resultar peligrosa para la salud de las personas o el medio ambiente, en el presente o para las generaciones futuras. Pueden utilizarse como materiales convencionales.
- Residuos de baja actividad: Poseen una radiactividad baja.
Se consideran de esta categoría aquellos residuos cuyo periodo de semidesintegracion sea inferior a 30 años. Este tipo de residuos debe almacenarse en almacenamientos superficiales.
- Residuos de media actividad: Poseen una radiactividad algo superior a los nombrados anteriormente pero siguen estando por debajo de los niveles de peligrosidad.
Al igual que los residuos de baja actividad, se consideran residuos de media actividad los que tienen un periodo de semidesintegracion inferior a 30 años y también deben almacenarse en almacenamientos superficiales.
- Residuos de alta actividad: se trata de aquellos materiales emisores de una radiactividad que supere los niveles impuestos por los límites de los residuos de media actividad.
Su periodo de semideintegracion supera los 30 años y deben almacenarse en almacenamientos geológicos profundos (AGP).
Residuos agropecuarios:
Pueden ser agrícolas o ganaderos, según el tipo de explotación agropecuaria que los origine.
Antes este tipo de residuos se utilizaba como fertilizantes por su contenido en materia orgánica y mineral pero el aumento en la aparición de explotaciones ganaderas de tipo intensivo, ha supuesto una producción de residuos orgánicos que ya no puede ser gestionada siguiendo las prácticas tradicionales, fundamentalmente por dos motivos:
- Su producción en grandes explotaciones, que dificulta la distribución para usos agrícolas
- El riesgo de una aplicación inadecuada, con los efectos medioambientales y sanitarios consiguientes.
Además de los restos orgánicos y minerales producidos debemos tener en cuenta también los restos plásticos producto de los invernaderos y detergentes utilizados para limpiar las naves agrícolas y ganaderas.
Los objetivos para la gestión de este tipo de residuos son:
- Minimización del Impacto Medioambiental.
- Minimización de la producción de residuos.
- Aprovechamiento de los residuos como fertilizantes y acondicionadores del suelo.
- Revalorización energética de un recurso renovable.
Residuos sanitarios:
Este tipo de residuo es cualquier tipo de material generado en lugares de atención sanitaria. Los residuos sanitarios se clasifican en los grupos siguientes:
a) Residuos sin riesgo:
- Tipo 1: No requieren exigencias especiales en su gestión.
Incluyen: papel, cartón, material de oficina, cocinas, comedores y en general los residuos que no derivan directamente de una actividad sanitaria.
- Tipo 2: No implican riesgo de contaminación biológica y sólo se han de observar medidas de prevención en su manipulación, recogida, almacenamiento y transporte, únicamente en el ámbito del centro sanitario.
Incluyen material de curas, ropa y material de un sólo uso contaminados con sangre, secreciones y/ o excreciones, todos ellos no englobados dentro de los residuos clasificados como residuos sanitarios específicos de riesgo.
b) Residuos de riesgo o específicos:
- Tipo 1: Se deben tomar medidas de prevención en su manipulación, recogida, almacenamiento, transporte y eliminación. Tanto dentro como fuera del centro generador, ya que pueden representar un riesgo para la salud laboral y pública.
Incluyen: material punzante y cortante (agujas, pipetas, hojas de bisturí, portaobjetos, cubreobjetos, capilares, etc.), cultivos y reservas de agentes infecciosos, resto de residuos sanitarios infecciosos y residuos de animales de investigación y/ o experimentación.Este tipo de residuos debe ser recogido y trasladado en envases homologados, con almacenamiento refrigerado. Tras un tratamiento de esterilización y trituración pueden ser asimilados como residuos municipales.
- Tipo 2: Su gestión está sujeta a requerimientos especiales desde el punto de vista higiénico y medioambiental, tanto dentro como fuera del centro generador.
Incluyen: residuos citotóxicos (restos de medicamentos y material de un solo uso que haya estado en contacto con estos fármacos), residuos radiactivos, otros residuos con restos de sustancias químicas y restos anatómicos humanos (cadáveres y restos humanos con entidad, procedentes de abortos u operaciones quirúrgicas).
La disposición de estos residuos requiere incineración a una temperatura que pueda garantizar su destrucción, como residuos especiales.
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BIBLIOGRAFÍA:
http://www.uclm.es/users/higueras/MGA/Tema06/Tema_06_Residuos_1.htm ,
http://habitat.aq.upm.es/cs/p3/a014.html ,
http://www.proyectosalonhogar.com/Ciencias_ambientales/13Residu/120ResInd.html ,
http://www.cma.gva.es/areas/residuos/res/pir/directiva_general/revpir8.html ,
http://portalsostenibilidad.upc.edu/detall_01.php?numapartat=4&id=108 ,
wikipedia.
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